Además de la presentación del informe hubo varias mesas de debate, la primera estuvo representada por varios ayuntamientos y la Comunidad de Madrid (CAM), todos sus representantes aportaron información sobre la política de desarrollo que se está viviendo en estos momentos en la CAM. Donde se matizo de nuevo la importancia de la política de cooperación como una política pública más “Tenemos que crear una ciudadanía global donde se ponga en el centro los derechos humanos”, Pilar Vilches. Ayuntamiento de Fuenlabrada.
Además desde la CAM, se reiteró el compromiso que se tiene con la cooperación al desarrollo, pero no se aportaron datos de las cuantías que se otorgarán en los próximos años. Javier Goizueta, director de Voluntariado y Cooperación de la Comunidad de Madrid señaló que “en estos momentos de crisis no resultaría coherente hacer compromisos a largo plazo que después no se puedan cumplir en materia económica.”
Resultó también muy interesante la ponencia de Edgardo Bilsky, perteneciente a la Red de ciudades y gobiernos locales unidos, que insistió en la perspectiva local en materia de desarrollo, denominando a la pobreza como un problema global y más urbano que rural, que no solo atañe a los países menos desarrollados sino que está centrada en países de niveles intermedios y así seguirá en los próximos 30 años. Este problema multidimensional de la pobreza requiere de políticas locales que establezcan programas que se adapten a sus condiciones y contexto, además de alianzas con agencias internacionales de desarrollo que materialicen en acciones concretas los debates establecidos en torno a los ODM.
En la última mesa de la tarde hubo una representación de todos los agentes de la cooperación que ahora mismo están más activos y su respuesta ante la situación de crisis, las universidades con su labor de formación teórica y de investigación, las ONG representadas por la coordinadora estatal de desarrollo, desde donde se traslado un mensaje de reconectar con la sociedad civil de nuevo y empoderar a la ciudadanía, para recuperar la misión de la que surgieron las ONG.
Desde el papel de las organizaciones sindicales aportando una visión más amplia de canalizar y distribuir los recursos.
Así mismo hubo una representación del sector empresarial. Jesús Rodriguez representante de la CEIM, insistió en que las empresas son un recurso más que se tiene que aprovechar ya que “las empresas y la CEIM pueden aportar muchas cosas en los proyectos de desarrollo, y aprendemos cada día de las ONG y las agencias de cooperación”.
Más información: fongdcam.org
Fuente: FONGDCAM
Además desde la CAM, se reiteró el compromiso que se tiene con la cooperación al desarrollo, pero no se aportaron datos de las cuantías que se otorgarán en los próximos años. Javier Goizueta, director de Voluntariado y Cooperación de la Comunidad de Madrid señaló que “en estos momentos de crisis no resultaría coherente hacer compromisos a largo plazo que después no se puedan cumplir en materia económica.”
Resultó también muy interesante la ponencia de Edgardo Bilsky, perteneciente a la Red de ciudades y gobiernos locales unidos, que insistió en la perspectiva local en materia de desarrollo, denominando a la pobreza como un problema global y más urbano que rural, que no solo atañe a los países menos desarrollados sino que está centrada en países de niveles intermedios y así seguirá en los próximos 30 años. Este problema multidimensional de la pobreza requiere de políticas locales que establezcan programas que se adapten a sus condiciones y contexto, además de alianzas con agencias internacionales de desarrollo que materialicen en acciones concretas los debates establecidos en torno a los ODM.
En la última mesa de la tarde hubo una representación de todos los agentes de la cooperación que ahora mismo están más activos y su respuesta ante la situación de crisis, las universidades con su labor de formación teórica y de investigación, las ONG representadas por la coordinadora estatal de desarrollo, desde donde se traslado un mensaje de reconectar con la sociedad civil de nuevo y empoderar a la ciudadanía, para recuperar la misión de la que surgieron las ONG.
Desde el papel de las organizaciones sindicales aportando una visión más amplia de canalizar y distribuir los recursos.
Así mismo hubo una representación del sector empresarial. Jesús Rodriguez representante de la CEIM, insistió en que las empresas son un recurso más que se tiene que aprovechar ya que “las empresas y la CEIM pueden aportar muchas cosas en los proyectos de desarrollo, y aprendemos cada día de las ONG y las agencias de cooperación”.
Más información: fongdcam.org
Fuente: FONGDCAM